Consejos para ir de camping con tu perro (y que salga bien)
Esto es lo que tienes que tener en cuenta para que sea una gran experiencia.
Escrito por Elena Fernández
Artículo actualizado el 23/04/2024
¿Te estás planteando irte unos días de camping con tu perro? Es una gran idea. Salir de acampada con tu colega de cuatro patas no solo es una ocasión para escapar de la rutina, sino que también fortalecerá vuestra relación. Tu perro disfrutará de actividades que lo mantendrán sano y mentalmente estimulado. Y tú vas a agradecer tener con él experiencias nuevas, fuera del entorno habitual.
Sin embargo, para que la aventura sea todo un éxito, es esencial estar preparado. Desde la elección del destino hasta la planificación logística, en este post te proporcionaremos valiosos consejos para asegurarte de que tu experiencia de camping con tu perro sea inolvidable y llena de momentos de conexión, diversión y seguridad.
Anota estos 10 consejos para planear una acampada con tu perro
Para que todo salga bien y no digas aquello de “una y no más”, echa un vistazo a lo que tienes que tener en cuenta para que esos días de acampada sean los primeros de muchos más.
1. Planifica con antelación
Aunque un viaje espontáneo llevándote a tu perro pueda parecer una aventura excitante, planificar con antelación es la mejor forma de garantizar que tanto tú como tu perro disfrutéis de una experiencia de acampada agradable, especialmente si es la primera vez que os metéis en esa aventura.
En este tema, improvisar no siempre sale bien. Por eso:
- Contacta con el camping. Aunque hayas leído en alguna plataforma que es dog-friendly, llama o envía un email para asegurarte de que no han cambiado sus políticas.
- Pide detalles de las normas aplicables a los animales de compañía. Algunos campings pueden tener restricciones respecto a la raza o tamaño de los perros.
- Comprueba las tarifas y cargos adicionales.
- Reserva con antelación. Sobre todo si es temporada alta.
- Estudia la ruta del viaje. Asegúrate de tener controladas las áreas de servicio y zonas de esparcimiento para que tanto tu perro como tú podáis “estirar las piernas”.
2. Pasa por el veterinario
Dependiendo del destino, no está de más programar una revisión antes de salir de viaje.
El animal debe tener todas las vacunas al día y el chip, que, afortunadamente, ya es obligatorio. Si tu perro tiene dolencias crónicas, el veterinario es quien mejor te dirá si es conveniente o no llevarlo de acampada y qué tienes que tener en cuenta.
Aunque lleves la protección antiparásitos “por el libro”, coméntale a tu veterinario a qué zona vas de viaje, por si fuese recomendable protección extra contra pulgas y garrapatas.
No descuides este punto, sobre todo si planeas pasear por zonas rurales, parques naturales y áreas con abundante vegetación. La enfermedad de Lyme, la leishmaniosis o la babesiosis no son ninguna broma.
3. Haz una acampada de prueba
Antes de lanzaros, tu perro y tú, a las vacaciones de vuestra vida, igual es buena idea irse uno o dos fines de semana a un sitio cercano, para familiarizarlo con la tienda de campaña, asegurarte de que no se estresa, socializa bien y convive sin problemas con el resto de campistas.
4. Ponle un GPS
Incorporar un GPS al equipo habitual para hacer salidas a la naturaleza es algo que, afortunadamente, muchos tutores ya están asumiendo como básico.
Y menos mal, porque a nosotros nos parece esencial (en este post te explicamos por qué).
Es que, imagínatelo: lo que eran unos días perfectos de vacaciones pueden convertirse en una pesadilla si tu perro se pierde. Y es algo que puede pasar en cualquier momento. Un rastro de un animal, un susto por un petardo o cualquier ruido fuerte… o que simplemente se despiste y, como no conoce la zona, no sabe regresar.
Con un GPS solo tienes que mirar el móvil, comprobar dónde está la señal e ir corriendo a buscarlo. Lo que te pueda costar lo ganas en tranquilidad, y eso no tiene precio.
5. Educación, ante todo (y no nos referimos a tu perro)
Uno de los aspectos más importantes al acampar con tu perro es respetar a los demás campistas. Es tu responsabilidad asegúrate de que no moleste a los demás, ya sea con ladridos excesivos o acercándose demasiado a otras personas sin su consentimiento.
Mantén a tu perro cerca de ti y evita que se acerque a la comida de los vecinos o a curiosear a otra parcela. Recuerda que no todo el mundo es amante de los perros, y en su derecho están. Por eso es esencial ser respetuoso y cordial con los demás.
Lleva a tu compañero peludo siempre con correa. Es algo que exigen en la mayoría de los campings, solo en algunos disponen de áreas donde lo puedes soltar.
Ten en cuenta, además, que en un camping lleno de gente tu perro puede sentirse abrumado o más excitado de la cuenta. Sus reacciones pueden ser diferentes a las habituales y más difíciles de anticipar. En tu mano está que la convivencia sea buena y te queden ganas de repetir la experiencia.
6. De nuevo, educación (ahora sí nos referimos a tu perro)
En este tipo de aventuras vas a agradecer mucho el esfuerzo y la dedicación que hayas puesto en la educación de tu perro.
Ir con un perrete que obedece, que sabe mantenerse equilibrado, que controla los ladridos, que no sale corriendo sin control… son cuestiones de educación básicas para que la salida de acampada no acabe siendo una pesadilla.
7. Cuida la higiene
No descuides el cepillado regular por el hecho de estar de vacaciones en una tienda de campaña. No solo tu colega estará más guapo, sino que mantendrá el pelo limpio y libre de enredos.
Además, aprovecha el momento para revisarlo un poco y asegurarte de que no hay garrapatas, reacciones alérgicas o pequeñas heridas.
También es conveniente limpiarle las patas antes de entrar en la tienda. Ten a mano toallitas húmedas o una botella de agua y un paño para darle un repasillo antes de iros a dormir.
8. ¡Alerta de cacas!
El cuidado del entorno es fundamental. Pon especial atención para asegúrate de recoger los excrementos de manera adecuada.
Sácalo regularmente fuera del entorno para evitar que pueda levantar la pata en algún lugar inconveniente, como la tienda de la parcela de al lado, los edificios comunes o los árboles.
9. Revisa el equipamiento
Uno de los trucos más útiles para acampar con perros consiste en mejorar su equipo actual. Una correa y un arnés estándar son adecuados para el viaje, pero ¿y si añades algunos extras para el tiempo libre?
Por ejemplo, un chaleco salvavidas para lanzarse al agua con seguridad, o una correa larga para pasear con más libertad. No olvides llevar sus juguetes favoritos (su peluche también debe irse de camping con vosotros) y otros con los que pueda interactuar y jugar contigo.
10. Nunca dejes a tu perro solo en el camping
Los perros son animales sociales y pueden sentirse ansiosos o estresados si se quedan solos en un lugar desconocido.
Si te planteas irte de acampada con tu perro asume que irá contigo a todas partes, salvo que tengas a quién dejárselo y se responsabilice de su cuidado. Pero nunca lo dejes solo y desatendido en un lugar extraño.
Ya solo queda ¡disfrutar de la acampada!
Si tu perro se acostumbra a acampar, tenéis por delante muchas jornadas de vacaciones inolvidables. Aquí abajo te dejamos algunos enlaces con sugerencias de campings dog-friendly que estarán encantados de recibiros a ti y a tu perro.
Esperamos que estos consejos te sirvan y te animen a probar. ¡Os va a encantar!
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Sobre la autora:
Elena Fernández
Loca de los gatos y de cualquier bicho viviente. De hecho, si pudiera tendría un zoo (de los éticos, claro). Me dedico a bucear en internet para encontrar trucos, productos y servicios para que humanos y animales convivamos felices.
Declaración: si bien realizamos una minuciosa investigación para asegurarnos de que el contenido que ofrecemos es preciso y veraz, ten en cuenta que este artículo es meramente informativo, y en ningún caso se debe interpretar como diagnóstico o consejo veterinario. Asimismo te recomendamos que, en todo tema relacionado con la salud de tu peludo, consultes siempre con tu veterinario y confíes en su consejo.